Revista de flamenco CANDIL

“Candil” es una revista ilustrada de flamenco, editada desde marzo de 1978, cuyo titular es la Peña Flamenca de Jaén. Su contenido se basa, principalmente, en estudios pormenorizados de investigación sobre flamenco, ensayo y poesía sobre este arte, así como crónicas de los eventos más significativos del sector, entrevistas con artistas y expertos sobre la materia, críticas discográficas y literarias y tribunas de debate, con cuidada selección de fotografía e ilustraciones. CANDIL contiene un compendio de tratados flamencos, y es una necesaria obra de consulta para los investigadores de nuestro arte universal y otras facetas relacionadas con el mismo, una verdadera antología de la historia reciente del flamenco y una importante base para la formación del aficionado.

martes, 7 de septiembre de 2021

Memoria flamenca. Rafael Valera entrevista a Pepa Montes (1993).

 

«Nunca se me olvidará cómo cantó Pastora en Arcos de la Frontera»

RAFAEL VALERA ESPINOSA

Rafael Valera entrevista a Pepa Montes (foto Pepe Pamos)

A lo largo de mi actividad dentro del flamenco no recuerdo el haber entrevistado a figuras del baile. ¿Por qué? Pues simplemente porque la labor que vengo desarrollando en radio está basada en el sonido, y el baile flamenco es imagen, proyección de figura, y mucho más. Hay que ser un perfecto comunicador radiofónico para poder describir -en una retransmisión radiofónica- algo de lo que pueda estar aconteciendo en el escenario cuando el baile copa el protagonismo-».

Así comenzaba mi justificación sobre mis carencias en la apreciación del baile flamenco en la entrevista que a Josefa Bastos Otero 'Pepa Montes', bailaora de tronío en aquél tiempo (1993) y en este, le realicé para la revista CANDIL. Y continué con mis inhibiciones y temores flamencos con el siguiente párrafo: «El centrarse en el toque y el cante pienso que conlleva el adquirir determinados hábitos profesionales. He de manifestar que excepto en los trabajos escritos, radiofónicamente he pasado de puntillas sobre los maravillosos matices del baile», señalaba.
 

«En mi familia no ha habido antecedentes artísticos de ninguna clase»

«Sin embargo, he tenido la satisfacción de poder dialogar con una auténtica señora del baile, Josefa Bastos Otero 'Pepa Montes'. A lo largo de nuestra conversación ha ido plasmando con detalle cada una de sus resoluciones flamencas en el escenario, el esfuerzo del estudio, o de los sudores que cuesta llegar al público de los festivales. En definitiva, la historia artística de una bailaora singular que a veces nos hace evocar las imágenes sepias de las añejas figuras del baile flamenco».

El baile.

También he de confesar que en el mayo de 1993 me sentía algo seguro sobre el baile, mas con cierta inexperiencia. Como miembro del jurado que fui del XIII Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba de 1992, y haber convivido con especialistas del baile como la maestra Pilar López Júlvez, artífice de artistas como Antonio Gades, 'Farruco', Mario Maya y muchos más, el citado Mario Maya, María Teresa Martínez de la Peña -discípula de la linarense Custodia Romero- María Dolores Jiménez Castro (compañera de 'La Quica') e Inmaculada Aguilar, aprendí bastantes aspectos de esta disciplina flamenca, pero no como los que poseía sobre el cante o el toque.

Y así iniciamos el diálogo:

-¡Comienza por tus orígenes!

- Me llamo Josefa Bastos Otero y nací en Las Cabezas de San Juan. Con dos años mis padres me trajeron a Dos Hermanas, que ha sido donde me crié. En mi familia no ha habido antecedentes artísticos de ninguna clase. Mi padre era un gran 'aficionao', pero no ha 'cantao', ni ha 'bailao', ni ha 'tocao'. A mí desde chiquitita me ha 'gustao' el flamenco, y cuando tenía siete años, un profesor de Dos Hermanas que ahora vive en Triana y que se llama Juanito Díaz, a iniciativa de un practicante que iba a mi casa y que decía que era una lástima que yo no bailara, pues empezó a darme clases para que aprendiera algo.

Pero no me quedaba en sevillanas, ni me quedaba en rumbas, ni nada de eso... ¡Yo quería aprender más! Coincidió que en aquella fecha 'El Rerre de Los Palacios', que mantiene amistad con mi padre, montaba un espectáculo en su pueblo. Mi padre le habló y en Los Palacios actué por primera vez delante de un público y de la mano de esa entrañable persona que era Paco Cabrera -por aquél tiempo presidente de la peña 'El pozo de las penas' de la citada localidad sevillana- que para mí fue como de la familia, y para los artistas como un padre. A partir de entonces fue cuando mis padres se dieron cuenta de que la decisión que yo había 'tomao', porque lo que me gustaba y me gusta es el baile, y no tuvieron más remedio que dejarme que hiciera mi carrera.

Posteriormente, comencé a participar en compañías que era donde se podía trabajar. Hice muchos años compañía con Juan Valderrama y en ellas trabajé con 'Pepe Marchena'. También conocí a 'La Niña de los Peines', que era ya muy mayor, y no se me olvida que un día, en Arcos de la Frontera, sentá en un banco que había en un camerino empezó a cantar, aunque había perdido ya un poco la memoria, como cantó a mí no se me olvidará nunca.

Recuerdo que una de aquellas compañías fue muy buena. La montó también Juan Valderrama y participaban 'Pepe Marchena', 'La Paquera de Jerez', Enrique Montoya y Antonio Fernández 'Fosforito'. Con esa compañía actuamos en Madrid en el Teatro Calderón. El haber formado parte de esas compañías me sirvió muchísimo en mi aprendizaje. Hoy en día se empieza en el tablao y, el teatro es otra cosa muy diferente y además te tienes que desenvolver de otra manera.

Cuando se acabó el periodo de las compañías fui a Madrid, al 'Corral de La Pacheca', y seguidamente me presenté a los premios del Concurso de Córdoba de 1974, lo que hizo que vida cambiara un poco. Volví a presentarme nueve años después al concurso cordobés, lo que creo que nadie ha hecho y también conseguí premio. La primera vez me presenté al de 'Juana La Macarrona' (alegrías, soleares, siguiriyas y cañas), porque creo que era el premio que yo podía conseguir y que a mí me gustaba tener.

La segunda vez recuerdo que los críticos me decían que como me arriesgaba, pero yo decía que tenía que ir y me traje el de 'La Malena' (tientos y tangos). Luego me dieron el premio de la Cátedra de Flamencología de Jerez, que me gustó muchísimo que me lo dieran, y que supone una agradable sorpresa cuando te lo otorgan, porque es un halago saber que había habido un seguimiento de tu carrera. Por último, he de decirte que del 'Giraldillo' del baile también salí muy satisfecha. Esto es a grandes rasgos mi vida artística.

Más información: Acceso directo a IDEAL

No hay comentarios:

Publicar un comentario